Cuando de limpieza de baño se trata entre mas brillo mejor. Sabes que cumpliste la misión cuando al final de la limpieza vez la puerta de vidrio del baño transparente. Mantener la claridad y el brillo se puede lograr con bastante facilidad con una escobilla de goma rápida después de cada ducha, pero es fácil perder la disciplina (especialmente cuando tienes prisa).
Desafortunadamente, omitir constantemente una limpieza permite que se desarrolle una acumulación de espuma de jabón y gotas de agua, por lo que es importante limpiar la puerta de la ducha tan pronto como note que comienza a aparecer una niebla.
Hay muchos productos comerciales en el mercado que prometen limpiar la puerta de su ducha en poco tiempo, pero matar la espuma de jabón se puede hacer de la misma manera con algunos ingredientes simples que probablemente ya tenga en la casa. Aquí está su guía de bricolaje sobre cómo limpiar las puertas de vidrio de la ducha para restaurar un brillo impecable.
Lo que necesitarás:
- Vinagre blanco
- Agua
- Líquido para lavar platos (opcional)
- Aceite esencial de su elección (opcional)
- Paños de microfibra
- Botella de spray vacía
- Escurridor (para mantenimiento diario)
Cómo limpiar la puerta de vidrio del baño:
1. Mezclar: combine una parte de vinagre blanco con tres partes de agua en un recipiente apto para microondas. LLeve la mezcla al microondas durante 1 minuto o hasta que este tibio. Una vez que el líquido se haya enfriado, viértalo en la botella de spray. Si desea evitar un olor amargo persistente del vinagre, agregue unas gotas de su aceite esencial a la mezcla. (Nota: tenga en cuenta que el vinagre podría dañar las duchas hechas de piedra. Todavía puede crear una solución efectiva al optar por un líquido para lavar platos que corte la grasa en lugar del vinagre).
2. Rocíe y aléjese : rocíe una capa de spray en la puerta de la ducha, cubriendo toda la superficie de manera uniforme. Deje que la solución repose mientras escucha su canción favorita actual (aproximadamente de tres a cinco minutos).
3. Seque la puerta: trabajando de arriba a abajo, seque la puerta con un paño de microfibra. Una vez seco, puede usar el paño para pulir cualquier raya o mancha. Deje la puerta abierta para asegurarse de que la humedad residual se evapore de la superficie del vidrio.
4. La prevención es clave: invierta en una escobilla de goma y comprométase a limpiezas periódicas. Tarda unos 30 segundos (y en realidad, ¡es extrañamente satisfactorio!). Prolongará la vida de su bañera y reducirá la posibilidad de daños permanentes en el vidrio en el futuro.
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